Resumen
- 1 Santa Maddalena di Canossa
- 2 Padre nuestro
- 3 Ave María
- 4 Gloria al Padre
- 5 Creo que
- 6 Angelus Domini
- 7 Laudes de San Francisco de Asís
- 8 Oración Matutina al Espíritu Santo por Santa Teresa de Ávila
- 9 Acto de ofrenda del día de Santa Teresita de Lisieux
- 10 Ángel de Dios
- 11 Descanso eterno
- 12 Ofrenda del día a María Santísima
- 13 Ofrenda del día al Corazón de Jesús
- 14 Oración de la mañana
- 15 Guárdame este día, Señor
- 16 Oración a Dios Padre
- 17 Oración de la mañana (Oh Dios, tú eres mi Dios, al amanecer te busco)
- 18 Oración por un corazón generoso
- 19 Oración para reconocer a Dios en los demás
- 20 Oración por la paz
- 21 Oración por la felicidad
- 22 Oración para inspirar pensamientos, palabras y obras
- 23 Oración por la fuerza
- 24 Oración de gratitud
- 25 Acto de fe
- 26 Acto de esperanza
- 27 Oración para superar las dificultades
- 28 Oración para compartir la alegría
- 29 Oración por el perdón
- 30 Oración por la sabiduría
- 31 Oración por la caridad
- 32 Cómo prepararse para la oración
- 33 Créditos y fuentes
Estas son las Oraciones de la Mañana, que puedes leer tranquilamente, para traer la bendición de Dios a tu día.
A continuación puedes leer el Santo de este día.

Santa Maddalena di Canossa
Tipología: Virgen
Date: 2025-04-10
Maddalena nacque a Verona il 1° marzo 1774 da nobile e ricca famiglia, terzogenita di sei fratelli. La sua vita fu subito segnata da tristi episodi, come la morte del padre, le seconde nozze della...
Padre nuestro
Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino,
Hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
y perdona nuestras ofensas
como nosotros perdonamos a nuestros deudores,
y no nos dejes caer en la tentación,
sino líbranos del mal.
Amén.
Ave María
Dios te salve, oh María, llena eres de gracia,
el Señor está contigo.
Eres bendita entre las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
Gloria al Padre
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Como al principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos.
Amén.
Creo que
Creo en un solo Dios,
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todas las cosas visibles e invisibles.
Creo en un solo Señor, Jesús Cristo,
Hijo unigénito de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
generados, no creados,
de la misma sustancia que el Padre;
por medio de él fueron creadas todas las cosas.
Por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó del cielo,
y por el Espíritu Santo
se encarnó en el seno de la Virgen María
y se convirtió en un hombre.
Fue crucificado por nosotros bajo Poncio Pilato,
murió y fue enterrado.
Al tercer día resucitó, según las Escrituras,
ha subido al cielo, está sentado a la derecha del Padre.
Y de nuevo vendrá, en gloria,
para juzgar a los vivos y a los muertos,
y su reinado no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, que es Señor y da vida,
y procede del Padre y del Hijo.
Con el Padre y el Hijo es adorado y glorificado,
y habló por medio de los profetas.
Creo en la Iglesia, una, santa, católica y apostólica.
Profeso un bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo venidero.
Amén.
Angelus Domini
El ángel del Señor anunció la anunciación a María
Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Ave María...
He aquí la esclava del Señor.
Que tu palabra se cumpla en mí.
Ave María...
Y el Verbo se hizo carne.
Y vino a habitar entre nosotros.
Ave María...
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
Porque somos hechos dignos de las promesas de Cristo.
Recemos:
Infunde tu gracia en nuestro espíritu, oh Padre;
tú, que al anuncio del ángel
nos has revelado la encarnación de tu Hijo,
por su pasión y su cruz
nos conducen a la gloria de la resurrección.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Laudes de San Francisco de Asís
Altísimo, Todopoderoso, Buen Señor,
Tuya es la alabanza, la gloria, el honor y toda bendición.
Sólo a ti, Altísimo, están confinados,
y ningún hombre es digno de ti mentovare.
Laudato si', Señor mío, con todas tus criaturas,
especialmente Sir Brother Sun,
Que es el día, y aligéranos para él.
Y es hermoso y radiante con gran esplendor:
De ti, Altísimo, tiene significado.
Laudato si', mi' Signore, per sora Luna e le Stelle:
En el cielo los has formado clarite et pretiose et belle.
Laudato si', mi Señor, para el Hermano Vento
et per aere et nubilo et sereno et omne tempo,
por la que das sustento a tus criaturas.
Laudato si', mi' Signore, per sora Aqua,
que es muy útil y humilde y casto.
Laudato si', mi' Signore, per friar Focu,
Por lo que enalteces la noche:
Y es guapo, e Icundo, y robusto, y fuerte.
Laudato si', mi' Signore, per sora nostra matre Terra,
Que sustenta y gobierna,
et produce diversos frutos con vistosas flores et hierba.
Alabado seas, mi Señor, por los que perdonan por tu amor
et sostengono infirmitate et tribulation.
Bienaventurados los que le apoyen en la paz,
ka de ti, Altísimo, son coronados.
Laudato si', mi' Signore, per sora nostra Morte corporale,
de la que ningún hombre vivo puede escapar:
Ay de los que mueren en pecado mortal;
Bienaventurados los que encontrarán en tus santísimas voluntades,
ka la morte secunda no 'l 'l hará daño.
Laudate et benedicete mi' Signore et rengratiate
y servirles cum grande humilitate.
Oración Matutina al Espíritu Santo por Santa Teresa de Ávila
Espíritu Santo, Amor de Dios,
descienden sobre mí.
Abre mi corazón para que pueda acoger
Tu amor, Tu luz, Tu fuerza.
Enséñame a rezar, a esperar, a confiar en Ti.
Llena mi corazón de paz, de alegría, de valor.
Haz de mí un instrumento de tu amor y de tu misericordia.
Amén.
Acto de ofrenda del día de Santa Teresita de Lisieux
Dios mío, te ofrezco todas las obras que haré hoy
con las intenciones y para gloria del Sagrado Corazón de Jesús;
Quiero santificar los latidos de mi corazón,
mis pensamientos y trabajos más sencillos
uniéndolos a sus méritos infinitos,
y expiar mis pecados arrojándolos al horno de su amor misericordioso.
¡Oh Dios mío! Te pido por mí y por mis seres queridos
la gracia de cumplir perfectamente tu santa voluntad
y aceptar por amor a ti las alegrías y las penas de esta vida pasajera,
que un día podamos reunirnos en el cielo por toda la eternidad.
Amén.
Ángel de Dios
Ángel de Dios, eres mi guardián,
ilumíname, guárdame, gobiérname y gobiérname
Fui confiado a ti por la Misericordia Celestial.
Amén.
Descanso eterno
Concédeles, Señor, el descanso eterno,
y brille para ellos la luz perpetua.
Descanse en paz.
Amén.
Ofrenda del día a María Santísima
Oh María, madre mía,
Te ofrezco este día,
que tú también ofreces al Señor,
por mi y por todas las almas
lo que haré y todo lo que me sucederá,
que mi corazón sea siempre tuyo
y nunca me dejes caer en pecado.
Amén.
Ofrenda del día al Corazón de Jesús
Divino Corazón de Jesús,
Te lo ofrezco por el Inmaculado Corazón de María,
Madre de la Iglesia,
en unión con el Sacrificio Eucarístico,
oraciones y acciones,
las alegrías y los sufrimientos de este día:
en reparación de los pecados y por la salvación de todos los hombres,
en la gracia del Espíritu Santo,
para gloria del Padre Divino.
Amén.
Oración de la mañana
Señor, en el silencio de este día que amanece,
Vengo a pedirte paz, sabiduría y fuerza.
Hoy quiero mirar al mundo con ojos llenos de amor,
sé paciente, comprensivo, amable y prudente,
vea más allá de las apariencias a sus hijos como usted los ve
y por eso no veo más que el bien en cada uno de ellos.
Cerrar mis oídos a cada murmullo,
guarda mi lengua de toda calumnia,
que sólo pensamientos de bendición habiten en mi espíritu.
Que yo sea tan benévolo y alegre
que todos los que se acerquen a mí sientan tu presencia.
Revísteme de tu belleza, Señor,
y déjame revelarte a todos en el transcurso de este día.
Amén.
Guárdame este día, Señor
Guárdame este día, Señor,
en tu bondad y amor.
Dame tu paz, tu luz,
y guiar mis pasos por el camino.
Haz que en todo momento pueda
sentir tu presencia y tu ayuda.
Haz de mí un instrumento de tu paz
y tu misericordia para todos.
Amén.
Oración a Dios Padre
Oh Dios, Padre de misericordia,
que creaste
o el hombre que lo ame
y compartir tu gloria con él,
escucha nuestra oración.
Danos tu gracia,
guíanos en tu verdad,
y haz que todas nuestras acciones se ajusten a tu voluntad.
Concédenos tu paz
y haznos capaces de vivir como tus verdaderos hijos,
amándote sobre todas las cosas y amando a nuestro prójimo como a nosotros mismos.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración de la mañana (Oh Dios, tú eres mi Dios, al amanecer te busco)
Oh Dios, tú eres mi Dios,
al amanecer te busco,
mi alma tiene sed de ti,
Mi carne te anhela,
como un páramo árido y sin agua.
Así que en el santuario te contemplé,
mirando tu poder y tu gloria.
Porque tu gracia vale más que la vida,
mis labios dirán tu alabanza.
Así que te bendeciré toda mi vida:
En tu nombre levantaré mis manos.
Me saciaré como en un buen festín,
y con voces de alegría te alabará mi boca.
Cuando pienso que eres mi ayuda,
Exulto de gozo a la sombra de tus alas.
A ti se aferra mi alma:
Tu mano derecha me sostiene.
Amén.
Oración por un corazón generoso
Señor, dame un corazón generoso,
capaz de amar incondicionalmente,
dispuestos a perdonar y comprender.
Déjame ver las necesidades de los demás
y responder con compasión y generosidad.
Enséñame a dar sin esperar nada a cambio,
servir con alegría y humildad,
y encontrar mi felicidad en hacer felices a los demás.
Amén.
Oración para reconocer a Dios en los demás
Señor, ayúdame a ver tu rostro
en cada persona que conozco hoy.
Déjame reconocer tu presencia
en los que me rodean,
especialmente en los pobres y los que sufren.
Enséñame a tratar a todos con respeto y amor,
como verdaderos hijos de Dios,
y llevar tu luz y tu paz
dondequiera que vaya.
Amén.
Oración por la paz
Señor, haz de mí un instrumento de tu paz.
Donde haya odio, déjame llevar amor,
donde hay ofensa, que yo traigo el perdón,
donde hay discordia, que yo traiga unión,
donde hay duda, que yo lleve la fe,
donde hay error, que traiga la verdad,
donde hay desesperación, que traigo esperanza,
Donde haya tristeza, déjame llevar alegría,
Donde haya oscuridad, déjame llevar luz.
Oh Maestro, que no busque tanto
para ser consolado, tanto como para consolar,
ser comprendido, tanto como comprender,
ser amado, tanto como amar.
Porque dando se recibe,
Perdonando se es perdonado,
muriendo se resucita a la vida eterna.
Amén.
Oración por la felicidad
Señor, hazme dichoso según tu corazón.
Hazme pobre de espíritu, para que sea mío el reino de los cielos.
Hazme llorar, para que me consuele.
Hazme manso, para que herede la tierra.
Hazme hambriento y sediento de justicia, para que me sacie.
Hazme misericordioso, para que encuentre misericordia.
Hazme puro de corazón, para que pueda ver a Dios.
Hazme pacificador, para que me llamen hijo de Dios.
Hazme perseguido por causa de la justicia, para que sea mío el reino de los cielos.
Amén.
Oración para inspirar pensamientos, palabras y obras
Señor, inspira mis pensamientos, palabras y obras,
para que sean siempre según tu voluntad.
Dame la sabiduría para reconocer lo bueno,
el valor de seguirle,
y la fuerza para hacer lo correcto.
Que tu Espíritu Santo guíe todas mis acciones,
y que en todo glorifique tu nombre.
Amén.
Oración por la fuerza
Señor, dame fuerzas para afrontar las dificultades de la vida.
Hazme firme en la fe, la esperanza y la caridad,
incluso cuando las pruebas son grandes.
Haz que confíe siempre en tu ayuda,
y encontrar en ti el valor y la determinación
para superar todos los obstáculos.
Hazme fuerte en la debilidad,
y que yo sea testigo de tu amor y de tu poder
en cualquier situación.
Amén.
Oración de gratitud
Señor, gracias por todas las bendiciones que me has dado.
Gracias por la vida, la familia y los amigos,
para el trabajo y la salud,
por cada pequeño y gran regalo.
Haz que siempre reconozca y aprecie
su bondad y generosidad.
Enséñame a vivir con un corazón agradecido,
compartir mis bendiciones con los demás,
y alabarte en cada momento de mi vida.
Amén.
Acto de fe
Dios mío, creo firmemente todo lo que has revelado
y que la Santa Iglesia nos propone creer,
porque tú eres la verdad infalible.
Con esta fe quiero vivir y morir.
Amén.
Acto de esperanza
Dios mío, espero firmemente confíe en que, por los méritos de Jesucristo,
me darás tu gracia en este mundo
y la vida eterna en el mundo futuro,
porque tú lo has prometido y siempre eres fiel en tus promesas.
Amén.
Oración para superar las dificultades
Señor, ayúdame a superar las dificultades que encuentro en mi camino.
Dame tu fuerza y sabiduría,
afrontar cada problema con valor y determinación.
Déjame encontrar apoyo y consuelo en ti
en tiempos de prueba,
y que confíe siempre en tu misericordia y en tu amor.
Amén.
Oración para compartir la alegría
Señor, llena mi corazón de alegría,
y déjame compartirlo con todos los que conozco.
Enséñame a llevar una sonrisa y una palabra de consuelo
a los que están tristes o desanimados.
Que mi alegría sea contagiosa,
y que a través de mí, otros sepan
tu bondad y tu amor.
Amén.
Oración por el perdón
Señor, ayúdame a perdonar a los que me han ofendido.
Dame un corazón misericordioso,
capaz de olvidar los agravios sufridos
y responder con amor y compasión.
Enséñame a seguir tu ejemplo de perdón
y ver a cada persona como tu hijo,
digna de amor y respeto.
Amén.
Oración por la sabiduría
Señor, dame sabiduría
para discernir tu voluntad en todas las cosas.
Enséñame a elegir siempre lo que es justo y bueno,
pensar antes de actuar,
y tomar decisiones que glorifiquen tu nombre.
Guíame con tu Espíritu Santo,
para que en todo momento pueda ser
testigo fiel de tu amor y de tu verdad.
Amén.
Oración por la caridad
Señor, enséñame a amar como tú amas.
Hazme capaz de ver a mi prójimo con tus ojos,
acoger con un corazón abierto y generoso,
y servir con humildad y dedicación.
Que mi caridad no tenga límites,
que pueden aportar consuelo y esperanza a los necesitados,
y que en cada gesto refleje tu infinita misericordia.
Amén.
Cómo prepararse para la oración
- Despertarse con el estado de ánimo adecuadoIntenta empezar el día con gratitud y positividadconsciente de la oportunidad de vivir un nuevo día.
- Encuentre un lugar tranquiloElige un lugar donde puedas estar en paz y tranquilidad, lejos de distracciones. Puede ser un rincón de tu casa, un lugar de culto o incluso al aire libre en la naturaleza.
- Adopte una postura respetuosaSiéntate o arrodíllate en una postura cómoda que te permita concentrarte en la oración. Mantén una postura erguida y digna.
- Respira profundamenteAntes de comenzar la oración, respira lenta y profundamente para calmar la mente y el cuerpo y facilitar la concentración.
- Centra tus pensamientosAléjate de las preocupaciones cotidianas y céntrate en el momento presente de la oración. También puedes leer un pasaje de las Escrituras o una reflexión espiritual que te ayude a centrar tus pensamientos.
- Abre tu corazónPrepárate para abrir tu corazón a Dios con sinceridad, humildad y confianza. Prepárate para escuchar Su voz en el silencio de la oración.
- Empezar con gratitudComienza tu oración dando gracias a Dios por las bendiciones de la vida, por el nuevo día y por su presencia constante en tu existencia.